Crítica 500 days of summer

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Esta película independiente norteamericana se llamó por acá (500) días con ella (y por otros lados 500 días juntos). Sería incorrecto llamarla una comedia romántica porque en los primeros minutos nos advierte claramente que esta no es una historia de amor con un final feliz.

La historia es la de Tom (Joseph Gordon-Levitt), un arquitecto que trabaja en una compañía de tarjetas de felicitación y su relación con Summer (Zooey Deschanel) una nueva chica en su trabajo de la que él se enamora. Así pasaran 500 días en el proceso de enamorarse y desenamorarse, de ahí viene el título original  que se traduciría como 500 días con Summer.

La película no se desarrolla de manera linear, saltamos del primer día en el que se conocen al día 247 y así sucesivamente, lo que permite muchos momentos graciosos, relacionados principalmente con la forma en que Tom idealiza el romance desde el principio como una gran historia de amor cuando en realidad no es algo tan perfecto como el quiere recordar.

Hay que notar que a pesar de un estilo bastante antinaturalista y con una estética típica de película independiente 500 days of summer logra contar una historia romántica más realisticamente que el 95% de las comedias románticas de hoy en día que no se preocupan en desarrollar sus personajes y que no dan razones por las cuales estos se enamoran.

Joseph Gordon-Levitt es uno de los mejores actores de su edad. Actúa desde que era un niño pero se hizo famoso por la serie 3rd Rock from the Sun en los noventa para dedicarse al cine independiente desde entonces, una pena que al elegir una película comercial haya optado por GI Joe, merece algo mejor. Acá hace de Tom un personaje querible a pesar de que por momentos podría haber caído en la categoría de loser por obsesionarse hasta tal punto con una chica que no estaba interesada en él. Además tiene un gran talento para la comedia.

Zooey Deschanel hace un papel similar a otros anteriores (Elf, Yes man), la chica poco convencional que hace lo que quiere en su vida. Funciona porque se supone que Tom la está idealizando y porque Zooey ya perfeccionó el personaje con tanta práctica.

500 días con ella es altamente recomendable porque todos hemos pasado algo similar o al menos hemos visto a nuestros amigos pasar por ello. Tiene además un protagonista carismático y una visión de Los Angeles diferente a la típica Hollywoodense.

Esta es una de las mejores secuencias de la película (la otra es una en la que se presenta en una pantalla partida la fantasía de Tom sobre como saldrá una noche con Summer vs. la realidad de esa noche), una escena de baile (no se preocupen a los que no disfruten los musicales, es la única)