Crítica: Australia, una decepción

Mi primera impresión de Australia es wow, sí, así soy yo, elocuente. Pero realmente la película impresiona visualmente, tiene caracter aunque por momentos pareciera querer funcionar principalmente como publicidad turística del país.

Australia es la historia de Lady Sarah Ashley (Nicole Kidman), una mujer inglesa que en 1939 viaja a Australia (obviamente) a buscar a su marido, quién ella cree le está siendo infiel. En realidad el pobre hombre está manejando una especie de hacienda a la australiana. El rancho está al norte del puerto por lo que el marido manda al "Arriero" (Hugh Jackman, y sí, su personaje no tiene nombre) para que la vaya a recojer, el arriero es un tipo un tanto rústico y obvio que choca con la señora inglesa, igual esto es lo de menos, apenas conté 10 minutos de película. El tono de esos diez minutos es de comedia disparatada, especialmente gracioso y un toque morboso es la primera vez que Sarah ve canguros. Pero ese tono no continúa por mucho tiempo, al llegar a la hacienda Sarah descubre a su marido muerto y después al ver como tratan a un nene en parte aborigen y sospechar del robo de ganado, decide arriar a las vacas hasta el puerto.

Podría seguir describiendo todo lo que pasa en la historia pero la verdad es que es inútil, pasa demasiado y la película cambia de genero y tono muchas veces. Siempre se mantiene como épica pero por momentos es cómica, dramática, absurda y trágica. Es también romántica y de guerra, sí, segunda guerra mundial incluída con bombardeo de Darwin como extra.

La parte romántica es, sorprendentemente, lo más maduro de la película. No hay mentiras ni apuestas, ni grandes traiciones, la relación es bastante abierta y para dos personas que parecen tener 40 años es adulta. El conflicto es por el papel que deben jugar en criar al nene, un chico en parte blanco y parte aborígen que corre el riesgo de ser enviado a una isla con otros mestizos para ser alejados de su familia aborigen.

Lo bueno: Hugh Jackman, increíble. Los paisajes también hacen que sea hermosa de ver (por detrás de Hugh). Otra cosa para resaltar es el uso de la canción de El mago de Oz temática y musicalmente. También la actuación de Nicole Kidman y el vestuario es espectacular en todos, pero la ropa que le dieron a ella es impresionante especialmente el vestido rojo de la fiesta.

Lo malo: Dios, la cara de Nicole Kidman te distrae, por momentos me perdía de que pasaba en pantalla por lo estirada que parece. No es una mujer vieja pero tiene que dejar de usar botox porque asusta, por momentos no se le mueve el rostro. Lo gracioso es que se ve peor en ciertas escenas que en otras, igualmente no llegó a los niveles de Meg Ryan (que en Todo sobre las mujeres me causó pesadillas) y después de todo el botox se va y puede recuperar sus facciones. Otro punto en contra es que la trama va y viene sin enfocarse en nada seriamente, por momentos es la historia de amor o la aventura de vaqueros o la lucha contra el racismo, etc, y a ningun aspecto se le da prioridad por lo que queda un poco destartalado.

Australia termina siendo una decepción porque con la gente involucrada podría haber sido mucho mejor, la culpa recae principalmente en el director y guionista Baz Luhrmann (Moulin Rouge, Romeo y Julieta y Strictly Ballroom), el tipo siempre fue muy grandilocuente pero esta es la primera vez que se perdió el foco así. Igualmente se deja ver y tiene destellos de ese humor absurdo.